El cordero lechal asado es una de las recetas más típicas, junto al cochinillo, de la cocina castellana.
Su carne es de color blanco y muy tierno debido a que el animal tan solo tiene unos 25 días de vida aproximadamente.
En Restaurante Casares os animamos a realizar en casa este delicioso plato con el que, sin duda, vais a sorprender a vuestros comensales.
Si os animáis a realizar esta deliciosa receta os recomendamos que compréis un cordero de calidad, ya que en el resultado final lo vais a notar.
Ingredientes para su elaboración:
– Medio cordero troceado (si lo adquirimos en una carnicería, le pediremos al carnicero que le realice unos cortes para que el asado quede más tierno). Si lo preferís, podéis utilizar las patas de cordero en vez de medio.
– Tomillo.
– Romero.
– Manteca de cerdo.
– Pimienta molida.
– Sal.
– Aceite de oliva virgen.
Y es hora de ponerse manos a la obra para su preparación:
Salpimentamos bien la carne de rodero por todas partes y colocamos en una fuente o bandeja apta para el horno.
Machacamos los ajos en un mortero, agregamos romero y tomillo al gusto, un vaso de agua y mezclamos con la manteca de cerdo. Con esta mezcla untaremos el cordero, dándole una capa por todos lados.
Precalentamos el horno a 180ºC e introducimos la bandeja con el cordero y horneamos durante unos 55 ó 60 minutos más o menos por cada lado (dependiendo de cada horno).
Cada media hora, sacamos el cordero del horno y vertemos sobre el su propio jugo para que la carne quede jugosa.
Transcurrido el tiempo de cocción en el horno, comprobamos que el cordero está bien cocinado por dentro y está bien asado por fuera, y si es necesario le damos cinco minutos más por cada lado para que quede bien asado por fuera y la carne quede jugosa por dentro.
Como veis es una receta que no tiene dificultad y está para “chuparse los dedos”.
Ya solo queda acompañarla con un buen vino y a disfrutarla.
Y si preferís que os sirvan un buen cordero lechal, ¡no dudéis en visitarnos y degustarlo en Casares!